La Centrales Nucleares de Almaraz I y II (CNA) están ubicadas en el término de Almaraz deTajo (Cáceres). Los terrenos propiedad de la central ocupan una extensión de 1.683 hectáreas y están localizadas en los términos municipales de Almaraz, Saucedilla, Serrejón y Romangordo. Dicen que tras realizar extensos y detallados estudios sobre la topografía del emplazamiento, los resultados concluyeron la idoneidad del lugar escogido, debido a sus características sismotectónicas, geológicas, hidrológicas y climáticas. Yo añadiría que las características más importantes fueron, la ignorancia, la falta de trabajo, la situación económica, la resignación y la depresión de la zona.
Aunque casi 30 años después sigue igual de pobre y de deprimida, a pesar de toda la publicidad y del dinero malgastado, la Central Nuclear de Almaraz I y II no ha llevado el progreso y el trabajo a la Comarca de Campo Arañuelo, sino que ha impedido que otras industrias, por ejemplo conserveras, se instalaran en la zona y se creara otro tipo de riqueza y otros puestos de trabajo donde no nos jugáramos la salud, la vida y el futuro de las siguientes generaciones.A pesar de las medidas de seguridad, los habitantes, particularmente los propios trabajadores empleados en la CNA, pueden recibir dosis máximas anuales de radiación diez veces superiores a las permitidas para la población en general o los mismos mineros que extraen y muelen el uranio. Y todavía más para los trabajadores eventuales contratados para tareas especiales de limpieza, reparación y descontaminación cuya precariedad laboral permite a menudo emplearles como verdadera carne de radiación. Porque la centrales nucleares en condiciones normales (sin que suceda un accidente) de forma rutinaria, contaminan el medio ambiente con radiaciones. Diariamente, a través de la chimenea y con el agua de refrigeración, Almaraz-I y Almaraz-II, los dos reactores nucleares de la CNA, expulsan al entorno elementos radiactivos tan peligrosos como el estroncio-90, el cesio-137, Iodo -131, kriptón-85, entre otros, que se incorporan a nuestro cuerpo a través de la cadena alimentaria. Los efectos patológicos de las dosis suelen ser diferidos y variar en función de la sensibilidad de la población expuesta, siendo muy superior entre los niños los neonatos y el propio feto, o los organismos jóvenes en general. Se suelen manifiestar los efectos somáticos en forma de leucemia y tumores cancerígenos diversos, pueden transcurrir varios años, incluso decenios antes de los primeros síntomas. Si la parte dañada afecta a la información genética, las mutaciones y malformaciones hereditarias pueden aparecer en generaciones sucesivas.
Pérdida de puestos de trabajo
La Comarca de Campo Arañuelo encontró una salida laboral en las paradas y recargas de las plantas, que se realizaba cada 12 meses durante un mes y medio y a veces dos. En este tiempo los trabajadores eventuales ganaban un dinero que luego con unas vacas o con el PER les servía para ir tirando todo el año y ni se preocuparon en formase para otro tipo de trabajo. Pero no era suficiente con esta mano de obra desorganizada y a disposición, tenían que ganar más y deciden ampliar la explotación de las plantas a 18 meses y apenas un mes de parada o 20 días y claro, las ganancias ya no son las mismas para los precarios de la comarca, pero los problemas se les acumulan y esos trabajadores tienen demasiados “chilindrines” como ellos llaman a la radiactividad y deciden contratar y subcontratar para que las responsabilidades las tengan otras empresas y subcontratas.
Pero podría ser peor: la CNA ha probado una barra de combustible especial fabricada en Bélgica, con el fin de realizar las recargas de combustible cada tres años, en lugar de cada año y medio como en la actualidad. La barra ha permanecido tres años en el núcleo de la central y ha sido a trasladada a Bélgica para ser estudiada. Tras tres años de quemado en el reactor, la barra es extremadamente radiactiva, por lo que se ha instalado en un cofre especial. El traslado de Almaraz a Bélgica se convirtió en una actividad extremadamente peligrosa, por su radiotoxicidad. Tal es así, que su traslado fue escoltado por fuerzas del ejército. Tuvimos que denunciar lo peligroso de este proceso y el hecho de que sean las fuerzas armadas las que se tengan que hacer cargo de proteger este combustible nuclear, cuando va a ser una empresa privada la que se beneficiede esta actividad.
Este peligroso material atravesó toda España y toda Francia para llegar a Bélgica. Y si Bélgica dice que adelante, que funciona, Almaraz I y II serán las primeras en probar el nuevo invento y serán las centrales nucleares que superexplotarán las plantas y solo pararán cada tres años para recargar estas barras de combustible.
Esto tiene muchas lecturas pero solo vamos a entrar en dos: 1ª La seguridad ¿Están seguros que unas plantas que llevan explotando por encima de sus posibilidades van a aguantar esta superexplotación? Y 2ª que por desgracia solo preocupa a la Comarca ¿Y los puestos de trabajo? ¿Sólo cada tres años? ¿Cuántos días? ¿En que subcontrata?
Comprando voluntades: Trabajo sí, pero para los alcaldes y concejales de la Comarca. Un método efectivo para que los problemas de una comarca no trasciendan es comprar voluntades. Un informe de los colectivos críticos con la existencia de la CNA detalla las personas que tras su dedicación a un cargo público han trabajado en la central o al revés. Los hay incluso que combinan ambos “oficios”. Al menos son 42 individuos. De todos los pueblos de la zona: Casas de Miravete, Saucedilla, Casas de Belvís, Deleitosa, Majadas de Tiétar, Casatejada, Higuera de Albalá, Romangordo y, por supuesto, del Ayuntamiento de Almaraz y de la población más grande, Navalmoral de la Mata. El actual portavoz de la planta atómica, Pedro Ayala Moreno, ha sido concejal de Navalmoral por el PSOE –dimitió como hace un año-, ha sido Portavoz del Grupo Socialista, al tiempo que empleado en las salas de control. Y hoy ocupa el puesto de portavoz de la CNA. María García Muñoz, concejala de Juventud del PP, trabaja en una Unión Temporal de Empresas (UTE) que asiste a la Central. En la misma situación se encuentra su compañero de partido Javier Álvarez Collado, que llegó para sustituir a la ex teniente de alcalde María Victoria Villalba, fallecida a los 47 años tras una larga enfermedad. El marido de Villalba trabaja en la central.También ha estado empleado en Almaraz Jorge González Ibarzo, concejal de Medio Ambiente en Navalmoral, del PP. Concejal de Hacienda durante dos legislaturas ha sido Pablo Morato, llevaba el Departamento de Medio Ambiente de la planta. Concejal por el PSOE y empleado en Explotación de Almaraz es José César Vizcaíno Hernández. El hijo del actual alcalde de Navalmoral de la Mata, Rafael Mateos Yuste, ha estado contratado en UTE. En la actualidad, trabaja en la asesoría de seguros propiedad del padre. Ángela Hernández, concejala del PP en Navalmoral, es la suegra de uno de los altos ejecutivos de Almaraz, Antonio Rayo. El Consistorio de Almaraz estuvo dirigido durante ocho años por el independiente Tomás Retamosa Borreguero, que trabajó en la planta atómica. Cuando era alcalde se hizo en Almaraz un cementerio para los generadores de vapor y la tapa de la vasija del reactor. Quien también fue alcalde y empleado de la infraestructura nuclear es Fausto Simón Álvarez, que empezó como vigilante jurado. En la actualidad, posee numerosos y lucrativos negocios en La Vera. En Millanes de La Mata José Antonio Corisco Alcalde y empleado de la central y Eulogio Jiménez concejal y empleado.
También trabajó en la CNA, nuestro profesor de la Universidad de Extremadura (UEX) y experto en Energía Nuclear, José Gañán, defensor a ultranza de la energía nuclear en diferentes foros. Aniceto González que ha sido alcalde de Majadas de Tietar estuvo en la CNA en protección radiológica y la Junta de Extremadura le asignó un puesto de dirección en la misma, estuvo un año y volvió a la CNA con el cargo de portavoz. En Peraleda de la Mata el hijo de una diputada de PP trabajó en la CNA en el departamento de prevención de riesgos y en el departamento de Química de la CNA. El ex alcalde de Castañar de Ibor cuando ocupaba dicho cargo trabajaba en la subcontrata de la CNA ELECNOR. Y en Saucedilla, el teniente de alcalde Pesado también trabaja en la CNA. En Valdehuncar: Elías Domínguez hermano de Eduardo Domínguez teniente de alcalde de esta localidad es ex jefe de Seguridad Física de la CNA. La alcaldesa de Almaraz, Sabina Hernández, presidió la asociación de los cerca de 70 municipios con centrales nucleares (AMAC). Esposa de un vigilante jurado de la CNA. Del Ayuntamiento de Almaraz, además trabajan en la CNA el 1º y 2º concejales del PP 1 del PSOE 1 del grupo independiente. Total casi todos.La última manifestación (el 13 de septiembre de 2008, ver cnt 349) en la que vecinos, colectivos y grupos ecologistas revindicamos el cierre de Almaraz I y II le provocó a la Sra. Alcaldesa una pataleta y mandó multar a una veintena de coches bien aparcados y buscar alguna infracción donde no la hubiese a la guardia civil de Almaraz y ésta consideró que una sentada pacífica, era una infracción terrible por la que había que denunciar y multar para que este desmadre no se vuelva a repetir, acusándonos de provocar desordenes gravísimos y tener que desviar la circulación que interrumpimos por vías alternativas.Seguridad
El PENCA (Plan de Emergencia Nuclear de la Comarca de Almaraz) es un documento carente de rigor, inútil e inservible, entre otras razones por ser un plan completamente desconocido por un amplio sector, de la administración y por casi la totalidad de la población.No hay suficientes medios ni personal preparado para hacer frente a una evacuación urgente de la población, ni para dispensar una atención correcta. El único hospital de la zona, no cuenta con medios, ni con personal suficiente y adecuado para atender un accidente nuclear, se encuentra dentro del área de evacuación. No está prevista ninguna actuación sobre ciudades como Plasencia, Coria, Cáceres y Trujillo. Después de los efectos del accidente de Chernobyl cuya nube radiactiva viajó por toda Europa, como puede la Administración permitir esta situación. En conclusión en caso de que se produjera un accidente grave en la Central Nuclear de Almaraz, la evacuación y atención adecuada de la población afectadas son imposibles. Nunca se ha hecho el demandado estudio epidemiológico de la zona. Nadie contabilizó el gran número de abortos que se produjeron en el Hospital de Navalmoral de la Mata, municipio contiguo a Almaraz, tras la fuga radiactiva del 13 de julio de 1988. Después de pagar durante décadas en el recibo de la luz esta energía insostenible (ni siquiera económicamente), ahora ponen precio a nuestra salud y seguridad (600 millones de euros) por alargar la vida a unas centrales nucleares viejas, cascadas, súper explotadas y amortizadas para poder sacar más dinero y construir la refinería de petróleo en Tierra de Barros acompañada de cuatro centrales térmicas en esta comarca de la provincia de Badajoz.
Por cierto es tan inservible este plan de emergencia que hoy ya no existe, el Consejo de Seguridad Nuclear a decidido quitarlo para poner otro mejor y llevamos varios meses sin ningún plan, en fin.
Aunque casi 30 años después sigue igual de pobre y de deprimida, a pesar de toda la publicidad y del dinero malgastado, la Central Nuclear de Almaraz I y II no ha llevado el progreso y el trabajo a la Comarca de Campo Arañuelo, sino que ha impedido que otras industrias, por ejemplo conserveras, se instalaran en la zona y se creara otro tipo de riqueza y otros puestos de trabajo donde no nos jugáramos la salud, la vida y el futuro de las siguientes generaciones.A pesar de las medidas de seguridad, los habitantes, particularmente los propios trabajadores empleados en la CNA, pueden recibir dosis máximas anuales de radiación diez veces superiores a las permitidas para la población en general o los mismos mineros que extraen y muelen el uranio. Y todavía más para los trabajadores eventuales contratados para tareas especiales de limpieza, reparación y descontaminación cuya precariedad laboral permite a menudo emplearles como verdadera carne de radiación. Porque la centrales nucleares en condiciones normales (sin que suceda un accidente) de forma rutinaria, contaminan el medio ambiente con radiaciones. Diariamente, a través de la chimenea y con el agua de refrigeración, Almaraz-I y Almaraz-II, los dos reactores nucleares de la CNA, expulsan al entorno elementos radiactivos tan peligrosos como el estroncio-90, el cesio-137, Iodo -131, kriptón-85, entre otros, que se incorporan a nuestro cuerpo a través de la cadena alimentaria. Los efectos patológicos de las dosis suelen ser diferidos y variar en función de la sensibilidad de la población expuesta, siendo muy superior entre los niños los neonatos y el propio feto, o los organismos jóvenes en general. Se suelen manifiestar los efectos somáticos en forma de leucemia y tumores cancerígenos diversos, pueden transcurrir varios años, incluso decenios antes de los primeros síntomas. Si la parte dañada afecta a la información genética, las mutaciones y malformaciones hereditarias pueden aparecer en generaciones sucesivas.
Pérdida de puestos de trabajo
La Comarca de Campo Arañuelo encontró una salida laboral en las paradas y recargas de las plantas, que se realizaba cada 12 meses durante un mes y medio y a veces dos. En este tiempo los trabajadores eventuales ganaban un dinero que luego con unas vacas o con el PER les servía para ir tirando todo el año y ni se preocuparon en formase para otro tipo de trabajo. Pero no era suficiente con esta mano de obra desorganizada y a disposición, tenían que ganar más y deciden ampliar la explotación de las plantas a 18 meses y apenas un mes de parada o 20 días y claro, las ganancias ya no son las mismas para los precarios de la comarca, pero los problemas se les acumulan y esos trabajadores tienen demasiados “chilindrines” como ellos llaman a la radiactividad y deciden contratar y subcontratar para que las responsabilidades las tengan otras empresas y subcontratas.
Pero podría ser peor: la CNA ha probado una barra de combustible especial fabricada en Bélgica, con el fin de realizar las recargas de combustible cada tres años, en lugar de cada año y medio como en la actualidad. La barra ha permanecido tres años en el núcleo de la central y ha sido a trasladada a Bélgica para ser estudiada. Tras tres años de quemado en el reactor, la barra es extremadamente radiactiva, por lo que se ha instalado en un cofre especial. El traslado de Almaraz a Bélgica se convirtió en una actividad extremadamente peligrosa, por su radiotoxicidad. Tal es así, que su traslado fue escoltado por fuerzas del ejército. Tuvimos que denunciar lo peligroso de este proceso y el hecho de que sean las fuerzas armadas las que se tengan que hacer cargo de proteger este combustible nuclear, cuando va a ser una empresa privada la que se beneficiede esta actividad.
Este peligroso material atravesó toda España y toda Francia para llegar a Bélgica. Y si Bélgica dice que adelante, que funciona, Almaraz I y II serán las primeras en probar el nuevo invento y serán las centrales nucleares que superexplotarán las plantas y solo pararán cada tres años para recargar estas barras de combustible.
Esto tiene muchas lecturas pero solo vamos a entrar en dos: 1ª La seguridad ¿Están seguros que unas plantas que llevan explotando por encima de sus posibilidades van a aguantar esta superexplotación? Y 2ª que por desgracia solo preocupa a la Comarca ¿Y los puestos de trabajo? ¿Sólo cada tres años? ¿Cuántos días? ¿En que subcontrata?
Comprando voluntades: Trabajo sí, pero para los alcaldes y concejales de la Comarca. Un método efectivo para que los problemas de una comarca no trasciendan es comprar voluntades. Un informe de los colectivos críticos con la existencia de la CNA detalla las personas que tras su dedicación a un cargo público han trabajado en la central o al revés. Los hay incluso que combinan ambos “oficios”. Al menos son 42 individuos. De todos los pueblos de la zona: Casas de Miravete, Saucedilla, Casas de Belvís, Deleitosa, Majadas de Tiétar, Casatejada, Higuera de Albalá, Romangordo y, por supuesto, del Ayuntamiento de Almaraz y de la población más grande, Navalmoral de la Mata. El actual portavoz de la planta atómica, Pedro Ayala Moreno, ha sido concejal de Navalmoral por el PSOE –dimitió como hace un año-, ha sido Portavoz del Grupo Socialista, al tiempo que empleado en las salas de control. Y hoy ocupa el puesto de portavoz de la CNA. María García Muñoz, concejala de Juventud del PP, trabaja en una Unión Temporal de Empresas (UTE) que asiste a la Central. En la misma situación se encuentra su compañero de partido Javier Álvarez Collado, que llegó para sustituir a la ex teniente de alcalde María Victoria Villalba, fallecida a los 47 años tras una larga enfermedad. El marido de Villalba trabaja en la central.También ha estado empleado en Almaraz Jorge González Ibarzo, concejal de Medio Ambiente en Navalmoral, del PP. Concejal de Hacienda durante dos legislaturas ha sido Pablo Morato, llevaba el Departamento de Medio Ambiente de la planta. Concejal por el PSOE y empleado en Explotación de Almaraz es José César Vizcaíno Hernández. El hijo del actual alcalde de Navalmoral de la Mata, Rafael Mateos Yuste, ha estado contratado en UTE. En la actualidad, trabaja en la asesoría de seguros propiedad del padre. Ángela Hernández, concejala del PP en Navalmoral, es la suegra de uno de los altos ejecutivos de Almaraz, Antonio Rayo. El Consistorio de Almaraz estuvo dirigido durante ocho años por el independiente Tomás Retamosa Borreguero, que trabajó en la planta atómica. Cuando era alcalde se hizo en Almaraz un cementerio para los generadores de vapor y la tapa de la vasija del reactor. Quien también fue alcalde y empleado de la infraestructura nuclear es Fausto Simón Álvarez, que empezó como vigilante jurado. En la actualidad, posee numerosos y lucrativos negocios en La Vera. En Millanes de La Mata José Antonio Corisco Alcalde y empleado de la central y Eulogio Jiménez concejal y empleado.
También trabajó en la CNA, nuestro profesor de la Universidad de Extremadura (UEX) y experto en Energía Nuclear, José Gañán, defensor a ultranza de la energía nuclear en diferentes foros. Aniceto González que ha sido alcalde de Majadas de Tietar estuvo en la CNA en protección radiológica y la Junta de Extremadura le asignó un puesto de dirección en la misma, estuvo un año y volvió a la CNA con el cargo de portavoz. En Peraleda de la Mata el hijo de una diputada de PP trabajó en la CNA en el departamento de prevención de riesgos y en el departamento de Química de la CNA. El ex alcalde de Castañar de Ibor cuando ocupaba dicho cargo trabajaba en la subcontrata de la CNA ELECNOR. Y en Saucedilla, el teniente de alcalde Pesado también trabaja en la CNA. En Valdehuncar: Elías Domínguez hermano de Eduardo Domínguez teniente de alcalde de esta localidad es ex jefe de Seguridad Física de la CNA. La alcaldesa de Almaraz, Sabina Hernández, presidió la asociación de los cerca de 70 municipios con centrales nucleares (AMAC). Esposa de un vigilante jurado de la CNA. Del Ayuntamiento de Almaraz, además trabajan en la CNA el 1º y 2º concejales del PP 1 del PSOE 1 del grupo independiente. Total casi todos.La última manifestación (el 13 de septiembre de 2008, ver cnt 349) en la que vecinos, colectivos y grupos ecologistas revindicamos el cierre de Almaraz I y II le provocó a la Sra. Alcaldesa una pataleta y mandó multar a una veintena de coches bien aparcados y buscar alguna infracción donde no la hubiese a la guardia civil de Almaraz y ésta consideró que una sentada pacífica, era una infracción terrible por la que había que denunciar y multar para que este desmadre no se vuelva a repetir, acusándonos de provocar desordenes gravísimos y tener que desviar la circulación que interrumpimos por vías alternativas.Seguridad
El PENCA (Plan de Emergencia Nuclear de la Comarca de Almaraz) es un documento carente de rigor, inútil e inservible, entre otras razones por ser un plan completamente desconocido por un amplio sector, de la administración y por casi la totalidad de la población.No hay suficientes medios ni personal preparado para hacer frente a una evacuación urgente de la población, ni para dispensar una atención correcta. El único hospital de la zona, no cuenta con medios, ni con personal suficiente y adecuado para atender un accidente nuclear, se encuentra dentro del área de evacuación. No está prevista ninguna actuación sobre ciudades como Plasencia, Coria, Cáceres y Trujillo. Después de los efectos del accidente de Chernobyl cuya nube radiactiva viajó por toda Europa, como puede la Administración permitir esta situación. En conclusión en caso de que se produjera un accidente grave en la Central Nuclear de Almaraz, la evacuación y atención adecuada de la población afectadas son imposibles. Nunca se ha hecho el demandado estudio epidemiológico de la zona. Nadie contabilizó el gran número de abortos que se produjeron en el Hospital de Navalmoral de la Mata, municipio contiguo a Almaraz, tras la fuga radiactiva del 13 de julio de 1988. Después de pagar durante décadas en el recibo de la luz esta energía insostenible (ni siquiera económicamente), ahora ponen precio a nuestra salud y seguridad (600 millones de euros) por alargar la vida a unas centrales nucleares viejas, cascadas, súper explotadas y amortizadas para poder sacar más dinero y construir la refinería de petróleo en Tierra de Barros acompañada de cuatro centrales térmicas en esta comarca de la provincia de Badajoz.
Por cierto es tan inservible este plan de emergencia que hoy ya no existe, el Consejo de Seguridad Nuclear a decidido quitarlo para poner otro mejor y llevamos varios meses sin ningún plan, en fin.
*Portavoz de la Plataforma Antinuclear Cerrar Almaraz (PACA) y Coordinadora de Ecologistas en Acción Extremadura.
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