Esta mañana, 1 de mayo, en la localidad de Malpartida de Plasencia, y en su céntrica plaza de San Gregorio, se ha llevado a cabo un acto promovido por la Plataforma de Afectados por la Línea de Alta Tensión de 220.000 Voltios y Doble Circuito que se prevé instalar en su término municipal por un itinerario medioambientalmente improcedente y que volaría por parajes singulares: Camocho, Robledo, Viñas,…
Con el objeto de reunir el mayor número de firmas para impedir su
construcción se aproximaron más de un centenar de personas entre afectados y
vecinos a las mesas instaladas, en las cuales pudieron recibir información
pormenorizada de las afectaciones particulares y generales que supone la
instalación industrial referida. La intención de la Plataforma es continuar
con la recogida de firmas de los ciudadanos de la localidad a lo largo de los próximos fines de semana y
con el objetivo de alcanzar un número suficiente de ellas como para que las
autoridades locales se posicionen de manera rotunda contra un instalación a
todas luces perjudicial.
Perjudicial para los intereses:
1º.-
Públicos Municipales, por su pernicioso y catastrófico paso por la
finca municipal Robleo y aledaños,
en los cuales quedará fulminada su integral conservación y lo que esto
supone para el futuro de nuestros intereses.
2º.- Por la numerosa afectación a particulares,
tanto en la zona norte de nuestro término como en el de las Viñas, y con una
clara afectación a lugares habitados y menos humanizados, como ofrecía el
itinerario inicialmente recomendado.
3.- Porque forma parte de un despropósito de la
industria del transporte eléctrico, que asociada a la de la generación no
dudan en disponer del territorio inmediatamente para el desarrollo de, cuando al
menos, dudosos desarrollos de sustitución de unas energías por otras, y que
también responden a intereses inmediatos que no percibe el ciudadano.
4.- Porque responde a una decisión
administrativa medioambiental “anómala”, completamente anómala en cuanto al
itinerario de la línea, frente a las recomendaciones inicialmente dadas por el
propio estudio de impacto ambiental. En este aspecto, no se puede dejar de
mencionar la responsabilidad de la administración al hacerse eco y respaldar
unas alegaciones peregrinas, luego invalidadas, y que supusieron una resolución
contra los (y en este caso nuestros) “intereses
medioambientales, socioeconómicos y paisajísticos que resultan más perjudicados”,
como así se recoge en el estudio de impacto.
Las argumentaciones anteriormente apuntadas fueron desarrolladas públicamente
en el acto central del acto matinal de recogida de firmas. Tanto el presidente
de la Plataforma
como otros miembros de ella hicieron referencia a la necesidad de manifestar la
oposición a la construcción de esta línea de Alta Tensión por la agresión que
supondrá para los bienes y personas sobre los que se pretende instalar y volar.
Así mismo, también miembros de la plataforma informaron sobre la realidad energética y las intenciones de los verdaderos intereses de la industria del trasporte y generación eléctrica, y en los que a menudo, los intereses económicos inmediatos o las estrategias de posicionamiento futuro de estas empresas, condenan y se cobran costos medioambientales que finalmente pagamos muy caro.
También el concejal y portavoz de Izquierda Unida en el ayuntamiento de
la localidad tomó la palabra para insistir en la argumentación de que ha sido a
lo largo del proceso administrativo donde este proyecto se ha interpretado
frívolamente y se ha desviado hacia
una resolución de dudoso criterio medioambiental.
Finalmente hizo
referencia a la decepción y tristeza que suponen la ausencia de adhesiones que
por parte del PSOE y del PP local se ha suscitado para esta causa, y añadió que
confía en que la actitud de “la venda ante los ojos, y dejarlo correr” que han
venido manifestando, también desde los asientos del ayuntamiento, no colisione
con esta misma referencia a la veracidad del estado de la cuestión, y respondan
a la voluntad y responsabilidad de estimular a sus respectivos simpatizantes
para que se adhieran a una causa que no es ni política ni partidista sino todo
lo contrario: colectiva. De todos los chinatos.
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